Uno de los mitos más comunes sobre los grupos electrógenos es que tienen un consumo excesivo de combustible. Sin embargo, la realidad es que su consumo depende del tipo de motor, la carga conectada y el mantenimiento del equipo.
Los modelos modernos están diseñados para ser más eficientes, ajustando el consumo según la demanda de energía. Además, la tecnología inverter y los sistemas de regulación electrónica ayudan a reducir el desperdicio de combustible.
Para optimizar el consumo, es importante no sobrecargar el generador y asegurarse de que funcione a una capacidad adecuada. También se recomienda realizar mantenimientos periódicos, ya que un motor en mal estado puede consumir más combustible del necesario.
En conclusión, los grupos electrógenos no tienen por qué ser costosos en términos de combustible si se elige el modelo adecuado y se le da el uso correcto. Con buenas prácticas, se pueden reducir costos y maximizar su eficiencia.