Los centros comerciales son espacios que dependen totalmente de la electricidad para su funcionamiento. Desde la iluminación y los sistemas de climatización hasta los ascensores y cajeros automáticos, todo requiere un suministro eléctrico estable.
En caso de un apagón, un centro comercial podría enfrentar grandes pérdidas económicas, ya que las tiendas no podrían operar y los sistemas de seguridad podrían verse comprometidos. Para evitar estos problemas, la mayoría de los malls cuentan con grupos electrógenos de respaldo.
Estos generadores se activan automáticamente en caso de una falla en la red, asegurando que los negocios sigan operando sin interrupciones. También ayudan a mantener funcionando las cámaras de seguridad, escaleras eléctricas y sistemas de emergencia, garantizando la seguridad de los clientes y trabajadores.
Los grupos electrógenos en los centros comerciales suelen ser de gran capacidad, con tecnología que permite una rápida transición de energía sin afectar la experiencia del visitante. Además, su mantenimiento es clave para evitar fallas en momentos críticos.